EL ABUSO Y LA PEDOFILIA: HORRENDAS REALIDADES ENCUBIERTAS DENTRO DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ

AYÚDANOS A DENUNCIAR ESTOS CRÍMENES PERPETRADOS EN EL NOMBRE DE LA RELIGIÓN QUE DICE TENER UN "PARAÍSO ESPIRITUAL"

Para beneficio de todos los Testigos de Jehová quienes somos o hemos sido ovejas trasquiladas por los "lobos opresivos" de la Sociedad Watchtower.
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Wednesday, May 13, 2015

En la República Dominicana los Testigos de Jehová también abusan

On May 8, 2015, at 7:04 AM, [...] <[...]@[...].com> wrote:
Buenas tardes, escribo desde la República Dominicana.
Quisiera contar mi historia a quien pueda interesar, no con la fría intención de que deje la congregación quien la consuma, sino, para que si llegara a identificarse con la misma, sepa que no está solo, que en cambio, hay muchas personas pasando por una situación similar, sin lugar a dudas eso es así.
Soy Testigo de Jehová bautizado desde hace unos años y al momento de la fecha, sigo activo aunque no con los mismos bríos con los que inicie mi carrera hacia la vida que realmente es vida.
Es necesario mencionar que estudie durante años antes de tomar esa decisión, pero, que por cosas de la vida, las circunstancias que me tocaron vivir y la euforia propia del momento, me hicieron sentir que era el momento justo para dar el gran paso de servir a Jehová, después de todo, no encontré ninguna razón válida para no hacerlo. Y lo hice!!!
Dos años antes de bautizarme, mi esposa y yo fuimos dos estudiantes activos, nos preparábamos para recibir a quienes nos visitaban, pero, por desgracia mi esposa enfermo y un tiempo después muere.
Yo continúe con los estudios hasta hacerme publicador, pero por asuntos personales, de soledad y por mi deseo de un cambio de ambiente me mude a otra ciudad.
Sin embargo, en mi equipaje para mudarme a esa ciudad no se incluiría solo experiencias dulces de mi roce con los hermanos luego de hacerme publicador y es que, durante un lapso de tiempo comprendido entre la muerte de mi esposa y la mudanza, trabaje para unos testigos de Jehová de la ciudad donde vivía.
En dicha empresa, fui encargado de personal y jefe de taller durante dos años. Durante ese tiempo junto a esos hermanos, mi progreso espiritual fue pobre y desgraciado, pues tenía poco valor a sus ojos, ¿en qué sentido?, si bien me trataban con respeto y reconocían la importancia de mi labor, en los asuntos que tenía que ver con la congregación me tenían a menos, ¿Por qué digo eso? Además de las posiciones que describí más arriba, era quien rellenaba los huecos de cualquiera de las posiciones que quedara vacía fruto de cualquier cosa que a ellos se les antojaba hacer. Eso provoco que llegara mal preparado para mis asignaciones de la escuela o que tuviera que hacerlo de manera apresurada. Me daba la impresión de que salía bien librado la mayoría de las veces. Siempre, estupefacto por aquel juego de mal gusto, me preguntaba en mis adentros, si tanto se afanan en buscar los mansos para enseñarles la verdad y llevarlos al remanso de paz de la organización de Jehová, ¿Cómo es posible que no me vean? Que necesito, predicar y para eso necesito también tiempo y espacio, que necesito llegar preparado a las reuniones.
Decidí renunciar a este trabajo y le puse un plazo a los hermanos (jefes) para que buscaran un reemplazo para mí, ya que era inminente que me fuera de la cuidad. Mi plan era librarme de ellos y de aquel círculo inmediato en el que me encontraba, el tiempo mismo me había dicho que no progresaría espiritualmente, que me causaba mucho daño y que finalmente necesitaba salir de este ambiente.
Me propuse ahorrar todo el dinero que pude en 7 meses, puse al tanto de la situación a los ancianos de mi congregación y le hice saber de mi intención de dejar la ciudad y marcharme.
Con deudas aun de los compromisos contraídos por la enfermedad y posterior muerte de mi esposa, con un hijo muy pequeño aun, y con las manos y el corazón lleno de mucha esperanza puse en marcha mis planes para,  culminado el periodo de tiempo otorgado a mis jefes, marcharme, con o sin prestaciones laborales. 
Pasaron los días entre sin sabores y encantos, ilusiones y deseos de progreso y estabilidad. Finalmente llego la semana esperada. Le informe 15 días antes de mi inminente salida. Y para mi sorpresa, recibí una solicitud de su parte para que me quedara un mes o dos más ya que no había reemplazo para mi posición aun, cosa que me pareció una falta de respeto y despreocupación o bien, pensándolo mejor, calcularon que yo no tendría el valor de dejar el trabajo, la posición o lo que ellos creyeran.
Después de meditarlo bien y movido por mi sentimiento de no causarles trauma o daños acepte y de paso puse los números sobre la mesa y revise como habían marchado las cosas en asuntos de ahorros. Bien, pase balance y con todo y mi esfuerzo, austeridad y honra de mis compromisos tenía el dinero suficiente para pagar la mudanza y marcharme, dinero que podía alcanzarme para continuar con los pagos de mis deudas durante al menos un mes incluyendo el alimento necesario.
Pero, como había aceptado quedarme al menos 60 días más con ellos, se me ocurrió invertir algo de dinero y ver si podía realizar algunos negocios y así no solo rendir el dinero, sino, no gastarlos en otras cosas, ya que en mi posición de entonces las necesidades eran muchas y las cosas que faltaban parecían infinitas.
Así que, como informático y tipo de negocios, invertir una gran parte de mis ahorros en compras electrónicas en estados unidos, ya que podía comprar a mejor precio y así obtener algo de ganancia. Me pareció excelente comprar unas planchas eléctricas giratorias que serían perfectas para las hermanitas de la congregación que necesitaran arreglar su pelo de forma práctica y rápida, ya que, por la predicación y las reuniones se les hacía difícil encontrar el espacio perfecto para asistir a los salones de belleza. Así que por un módico precio, las hermanas precursoras o en general, podrían adquirir este articulo y sacar ventaja del tiempo que difícilmente podían encontrar para el cuidado de su pelo.
Basta decir que perdí todo mi dinero, mi jefa se encargó de distribuir las planchas entre las hermanas y finalmente perdí todo, hasta el día de hoy no se fue un plan macabro de parte de ella, ya que al dar las planchas a las hermanas y estas no pagarme, o bien pagarme y ella no reportarme el dinero, me quedaría sin nada y en esa condición no podría irme del trabajo, o bien, todas esas hermanas intencionalmente tomaron los artículos y literalmente se los robaron, pues nunca lo pagaron y jamás recibí dinero alguno.
Debo mencionar que esto marco profundamente mi visión de las cosas, (aun publicador), medio una idea nefasta y sombría de las cosas, y tanto mis motivos como mis objetivos a partir de ese momento cambiaron mucho. Pasaron los días y antes las preguntas de que pasaba con mi dinero y que era el dinero de yo mudarme y establecerme solo recibía excusas y pena expresa de que, no sabía que pasaba con las hermanas que no pagaban y cosas así.
Cosa que fue profundizando en mí el deseo de dejar todo y hasta renunciar a ser publicador. Llegado el día de mi despedida,  con pocos ahorros y seguro sentimiento de pérdida en todo sentido sumado a la inseguridad misma de no saber qué hacer pues no tienes el recurso que mueve el mundo… el dinero… llame a mis jefes y frente a ellos revisamos todas las cajas en la tienda que contenían las cosas que pensaba llevarme pues eran de mi propiedad. Le hice formal entrega de mi departamento y los documentos que tienen que ver con el mismo, le entregue al chico que ellos buscaran para que le enseñara el proceso y les informe que estaba listo.
Y subí mis cosas a un camión que las llevo hasta la humilde vivienda donde residíamos mi hijo y yo y acordamos con ese mismo transporte para que fuera quien llevara, junto a mis cosas, a mi hijo y a mí, todos mis sueños, penas y planes, además de mis motivos más profundos y recónditos que llegue a sentir por mi amarga experiencia.
Al día siguiente sin más nada que hacer que esperar pasar el tiempo y que finalmente llegara la hora de marcharme de la cuidad, me senté en el borde de la calle a calcular cual era la mejor manera de rogarle al chofer del camión que me llevaría pues, me faltaban 2 mil pesos de los 9 mil que me había solicitado para llevarme hasta mi lugar de destino.
Amargado y decepcionado, casi lleno de odio y desprecio, pues poco tiempo antes tenía lo suficiente para evitar rogar y mendigar y por culpa de un grupo de seres humanos que predican la verdad y el amor al prójimo me encontraba condenado a mendigar y rogar, colocando mi prestigio y dignidad a la merced de que Jehová me ayudara a dulcificar el corazón de aquel hombre, uno de los que llamamos mundanos.
Así fue, dicho y hecho tuve casi que arrodillarme aquel hombre pues ya tenía que entregar la casa donde vivía  y  todo empacado.
Finalmente logramos entrar en carretera y llegamos a nuestro destino, fui arruinado, con un hijo y sin dinero y sin nada a parar a casa de mi madre, (decepcionante para cualquier ser humano con deseos y que sabe que es incorrecto desde el punto de vista social, pero lo que más ardía era el motivo por el cual estaba justo en esa posición).
No me retraje, pasado unos días, hablé con uno de mis hermanos carnales, (otro de los llamados mundanos) y le pedí que intercediera y tomara para mí un crédito un préstamo y con ese dinero sumado mis habilidades, tener con que producir al menos para comer y vivir mientras las cartas en esa nueva ciudad se ponían sobre la mesa y ver qué pasaría finalmente después de todo.
El acepto sin reparos pues, supongo que le dio mucha lastima ver su hermano rebajado y prácticamente en el polvo terrestre. Instale un pequeño negocio y decidí olvidar por completo mi vida pasada, eso incluía no solo abandonar la congregación, y el robo craso y el maltrato de aquellos hermanos, sino también, recibir a los testigos que sin duda visitarían la casa y mi pequeña empresa, escucharlos y dejarlos ir ocultándoles por completo que fui publicador y que conozco las cosas que ellos tratan de enseñarme.
Pero no soporte mucho tiempo, mi amor por Jehová y por las cosas que tenía en mi corazón fue de demasiado peso. Me puse en contacto con la congregación donde me forme y le di la dirección de la congregación más cercana el número de la congregación  y el contacto del secretario para que ellos enviaran mis documentos mediante la sucursal dominicana o por el correo ordinario.
Todo salió bien y después de reintegrarme a la nueva congregación finalmente termine bautizándome y aceptando algunos pequeños privilegios como sacar algunos grupos, aceptar el precursorado auxiliar de 50 horas al mes y también, lecturas de las atalayas y el libro de la reunión de servicio, también  me encargaba del sonido.
Todo perfecto, hasta que una hermana puso sus ojos sobre mí. Ahí comenzó lo que yo llamo hasta este día, el talón de Aquiles de mi permanencia en la congregación. Esta hermana según me entere por información dada por uno de los ancianos de la congregación tenía un gran historial de delitos religiosos, por llamarlo de alguna forma. Es una de esas hermanas que jamás comenta, seguramente por no tener la moral de hacerlo en público sobre temas engorrosos o delicados, tampoco de asuntos generales e impersonales.
El punto es que es una de esas hermanas desesperadas, los años avanzan y el sentimiento de soledad seguro la castiga, es divorciada su ex es expulsado y uno de sus hijos también, todo un modelo de familia desastre.
Le comunico a ese anciano que tengo problemas económicos, sociales que resolver y que no estoy interesado en la hermana ni en ninguna otra, soy prácticamente nuevo en la congregación y no mucho tiempo de bautizado por lo que la mentalidad de las hermanas no es atractiva para mí, al menos aun. Soy una persona con alto sentido del progreso y el bienestar, no soy ambicioso en el mal sentido, pero jamás he perdido el norte del valor de las cosas. Que para vivir se necesita dinero, que para hacer todo necesitamos efectivo y eso es posible conseguirlo, tenerlo y manejarlo de manera honesta y sin caer en excesos. En general me gusta vivir cómodo y que dentro de mis posibilidades no me falte nada que sea posible conseguir. No me gusta la vida insegura hasta en los más mínimos detalles y vivir de lo que aquí en dominicana se conoce como “EL CHIRIPEO” trabajo sumamente informal para mí no es atractivo, tengo un hijo por quien velar su vida depende de mí.
El hermano anciano no me comento nada, pero luego por sus acciones, comprendí que pensó, si ella y yo éramos solteros, sería una buena idea que nos uniéramos, después de todo, la fe lo aceptaba y Jehová estaría contento con eso.
Pero, lo que pasaría después fue insospechado. Le puse las cosas bien claras a la hermana y le expresé mi deseo de no casarme aun, además de no tener ningún tipo de relación y más aún, fui sincero y le dije más de lo que debía, le exprese, sanamente, que literalmente les temía a las hermanas.
Pensando en mi infantil creencia de que todo terminaría ahí, pues habían quedado claras las cosas como el esclavo recomienda, seguí mi camino espiritual y mi lucha por estabilizar mi vida, sin sospechar que las nubes negras de una tarde sombría se asomaban a mi espalda.
La marea de chismes y mentiras que desataría la cruzada de esa hermana herida junto al apoyo de ese anciano al que me acerque sería interminable y para mi deseo, casi terminal. 
El hermano siempre se me acercaba para sacar de mí, información, ver cómo iban las cosas, y ¿Cómo marcharían? Le dije que no quería nada con ella así que, ya no le di más mente al asunto, todo estaba, según yo, arreglado.
De repente este anciano (del cual descubrí tiempo después, que era de los cachanchanes, súper amigo de esa hermana) comenzó a presionarme, a amenazarme “amorosamente” supuestamente el, el que yo jugara con los sentimientos de esa hermana me traería “problemas”,  yo me tomaba a chiste aquello, ya que siempre pensé que lo hacía en broma, él era testigo en primera persona y desde el primer momento estaba enterado de que mis deseos no estaban dirigido en ningún sentido a esa hermana.
Su persecución no tenía límites, me abordaba a diferentes horas a mi casa, también en las calles durante la predicación. Y hasta llego a llamarme para sermonearme obligándome a dejar mi lugar como supervisor de la limpieza de los baños durante mi última asamblea.
Además de su fijación y fatídica  insistencia en el tema, termine de convencerme de su intención por comentarios de otros hermanos que me preguntaron sobre mis supuestos planes de casarme con esa hermana y hasta de mi relación, que para mi sorpresa, ya estaba en boca de muchos en la congregación. 
Investigue bien el asunto y resulta que una familia enorme que siempre estaba en los grupos que suelo sacar al territorio, fue donde se inició el conato de incendio y de habladuría alimentado por la hermana en cuestión que deseaba según yo, hacerme daño, pues no vi otra intención en sus actos.
Todo aquel aluvión de chismes y mentiras, miradas intrigantes y amenazas por algo que yo no tengo nada que ver, comenzó a desanimarme, me resultaba increíble que esas cosas pasaran en la congregación pese a mi triste pasado reciente en otra.
Mi ánimo comenzó a decaer y termine transfiriendo la mayor parte de mis estudios, me costaba estar haciendo esfuerzos por personas masas para atraerlos a lo que sería, en un gran porcentaje de posibilidad, una tragedia y un ocuparse en cosas sin importancia y de mucha gente mentalmente enferma.
También mis horas de predicación, han bajado mucho muchísimo, renuncie al precursorado auxiliar de 50 horas. 
Finalmente pague el dinero que mi hermano me había prestado y conseguí un trabajo, en una nueva empresa de la ciudad, un trabajo cómodo y remunerativo que me está dando muchas cosas positivas. El roce con otras personas que aun siendo llamados mundanos, me parecen personas equilibradas en su gran mayoría y muy normales. Además, llego por las noches a casa y así evito tener que exponerme a la actual persecución a la que estoy siendo sometido.
Sé que soy objeto de muchas críticas, pues también deje por voluntad todos los privilegios de la congregación, ya no suelo leer ni atender el audio y di los grupos que sacaba al territorio a otros hermanos con mejor disposición que yo.
Sé que me encamino a ganarme 8 millones de enemigos en el mundo, al menos así voy a sentirlo, pero es mejor ser sinceros conmigo mismo, después de todo, Jehová en quien creo, impondrá paz a todos, buenos y malos, a quien le otorgue el paraíso o la muerte eterna, todos tendrán paz. Pero, él sabe lo que realmente hay en mi corazón.
De lo que pase en lo adelante, queridos amigos, prometo informarles.

2015-05-12 5:15 GMT-07:00 [...] <[...]@[...].com>:
Hola, buenos días, [...]…
Pero antes te comento, [...] estuvieron dos ancianos buscándome en casa, el coordinador de ancianos y el secretario, nada más y nada menos. Con eso de las visitas de pastoreo, supongo que todo sigue su cauce natural, orden lógico, así son las leyes físicas… así llegare a mi final en las filas de los TDJ.
(CONTRIBUIDO)